Descarta patologías orgánicas que puedan ser el origen o estar agravando tu situación.
Centrada en el paciente. Juntos decidiremos qué técnicas o estrategias pueden ayudarte a cambiar aquello que deseas.
Ponte en manos de un profesional de confianza para solucionar problemas sexuales o conflictos de pareja. Ya has dado el paso más difícil, ahora solo debes continuar.